¡Habemus nenes!: Por Antonio Pozzi

Francisco 1

¿Qué pasa con los curas y los nenes? Perdón, el inicio de los problemas se remonta desde la aprobación del celibato. Entonces ¿Cuál es el problema de los malditos curas a lo largo de la historia con los menores de edad? Si vas a tomar votos de celibato, por lo menos cumplilo ¡pedazo de infeliz! Y no te vengas con la excusa de que la tentación te venció, porque no hay excusa que valga, a los nenes No se los toca. Y lo peor es que son clasistas,  solo abusan de niños y niñas de las clases bajas. Y encima todos siguen creyendo en la pureza, en la caridad, en la bondad de la iglesia. Le hacen la vista gorda a esos pederastas energúmenos.

La ONU y varias otras organizaciones llevaron a cabo una serie de investigaciones en contra del Vaticano y la iglesia católica acusándolos de pedofilia. El Papa Francisco confeso que por lo menos un 2% de los curas se “encargaban” de los niños. A ellos les pareció poco, pero en realidad es una ¡Barbaridad! Esto significa que más de un millar de menores fueron abusados por curas pervertidos, dejándoles trastornos psicológicos de por vida. Que caraduras. Y lo peor es que una enorme población sigue apoyando a una religión que tiene un curriculum de “bondad y misericordia” a lo largo de su historia. Tuvieron a la Inquisición, está llena de pederastas perturbados, son todos unos ignorantes dedicándose a encerrar todos aquellos que querían progreso (Darwin, Galileo, etc.), y seguro que no les gustaban los Beatles.

Realmente me da bronca que una institución tan bien tenida en cuenta, (y suponiéndose que es sagrada) por el pueblo, sea capaz de cometer tales atrocidades. La peor amenaza del ser humano no es el humano mismo, sino la Iglesia, que ha cometido estragos y asesinatos durante más de 2000 años (por supuesto me refiero a la iglesia cristina)

Lector o lectora (para que después no se quejen que soy machista) no dejemos que estos hijos de mala madre sigan teniendo impunidad, porque los casos de pedofilia cometidos por curas seguirán, y los niños no nos podemos defender, no podemos hacerle frente a estos “representantes de dios”, porque ellos son muchos, pero nosotros somos muchos más.